La Comisión Europea presentó el "Competitiveness Compass" ("Brújula de Competitividad") el 19 de febrero de 2025, una estrategia integral para fortalecer la posición económica de la Unión Europea y apoyar a sus empresas frente a competidores globales como Estados Unidos y China. Este plan se articula en tres pilares fundamentales: innovación y tecnología, simplificación regulatoria, y resiliencia económica combinada con desarrollo del talento, ofreciendo a las empresas un marco para crecer de manera sostenible y competitiva. La Comisión estima que estas medidas podrían ahorrar a las empresas hasta 260.000 millones de euros anuales de aquí a 2040, aliviando las cargas estructurales que han lastrado su competitividad.


Esta estrategia se articula en torno a los siguientes ejes:

1. Innovación y tecnología como motor de crecimiento.

El "Competitiveness Compass" prioriza la inversión en sectores clave como la inteligencia artificial, la biotecnología y las energías limpias. Las empresas podrán acceder a incentivos financieros específicos, incluyendo préstamos del Banco Europeo de Inversiones y fondos del programa Horizon Europe, para desarrollar proyectos innovadores que las posicionen a la vanguardia de la transición digital y ecológica. Este enfoque no solo busca alinear la industria con los objetivos del Pacto Verde Europeo, sino también garantizar que la UE mantenga una ventaja tecnológica frente a las presiones del mercado global. La Comisión destaca que estas inversiones son esenciales para contrarrestar los altos costes energéticos y fomentar un crecimiento económico sostenible.

2. Reducción de la burocracia para una mayor eficiencia.

Un segundo pilar del plan es la simplificación regulatoria, diseñada para aliviar las cargas administrativas que frenan a las empresas, especialmente a las pymes. La Comisión propone armonizar normativas entre Estados miembros y establecer ventanillas únicas digitales, lo que podría ahorrar hasta 260 000 millones de euros anuales a las empresas de aquí a 2040. Esta reducción de la burocracia permitirá a las compañías operar con mayor agilidad en el mercado único, eliminando trabas que han lastrado su competitividad. El objetivo es crear un entorno empresarial más dinámico y accesible, facilitando la expansión y la innovación sin sacrificar estándares.

3. Resiliencia económica y desarrollo del talento.

El tercer eje combina la resiliencia de las cadenas de suministro con la formación de una fuerza laboral preparada para el futuro. Para reducir la dependencia de proveedores externos, expuesta durante la pandemia y conflictos geopolíticos, el plan fomenta la diversificación y la producción dentro de la UE, fortaleciendo la autonomía económica. Paralelamente, se lanzarán programas de capacitación en habilidades digitales y técnicas, apoyados por fondos europeos, para asegurar que los trabajadores puedan responder a las demandas de una economía moderna. La Enterprise Europe Network complementará estas acciones, ofreciendo asesoramiento práctico a las empresas que busquen aprovechar estas oportunidades.

El "Competitiveness Compass" refleja la determinación de la Comisión Europea por impulsar un cambio significativo en el panorama económico de la UE. Pensado para empresas de todos los tamaños, este plan busca prepararlas para enfrentarse a un mercado global desafiante, al tiempo que promueve los principios de sostenibilidad y cohesión social que caracterizan a la Unión. Con esta estrategia, Europa pretende sentar las bases para convertirse en un referente de innovación y resiliencia en los años venideros, si bien el éxito de estas ambiciones dependerá de su implementación y del contexto futuro.

Fuente: https://commission.europa.eu/document/download/10017eb1-4722-4333-add2-e0ed18105a34_en